Ya lleva mucho tiempo que tengo ganas de escribir algo, de sacar las ideas de mi cabeza, pensaba en cosas como hacer un TikTok, hacer vídeos en un canal de Youtube, u otras cosas. Pero siempre resulta en una enorme carga y ansiedad. Principalmente por ese sentimiento del “¿Para qué?”. Cuando uno crea contenido usualmente lo primero que se le viene a la mente es “¿Quién lo va a ver?” y usualmente esos dos pensamientos se juntan: “¿Para qué?, ¿Quién lo va a ver?”. Vivimos en una época en la cual en muy poco tiempo hay montones y montones de información por todos lados. Durante mucho tiempo hubo silencio y ahora todo mundo habla tanto y al mismo tiempo que sólo se puede escuchar el ruido. Es como cuando uno visita un bar donde está la música muy fuerte, haces un esfuerzo por alzar la voz y las personas que quieren escucharte se acercan a tí y tratan de interpretar lo que dices.

En cierto modo es como en esa escena de “TodoPoderoso (2003)”

La única diferencia es que las voces no están en tu cabeza, están en tu celular. En Twitter, en Reddit, en Whatsapp, los Podcast, los Vlogs. Todo mundo demandando algo de atención. Y luego en mi caso, llego con mi síndrome de impostor preguntándome constantemente:

“¿Porqué mi opinión es más importante que la de los demás?”

“¿Quién soy yo para que la gente lo escuche?”.

Son dos preguntas que vienen directamente del ego, empezando porque asumo que para ser escuchado mi opinión debe ser “más importante”. Lo cual irónicamente termina volviéndose en una forma de autosabotaje.

Ahora bien…

Sé que mucha gente escribe su blog a forma de diario, yo personalmente he estado manteniendo algunos diarios. Resulta hasta de repente terapéutico. Tu mente produce ideas todo el tiempo (Y más cuando eres de alguna forma un creativo), eventualmente necesitas vaciarla en algo; Algunas personas hacen arte, música, pintan, dibujan, se graban a sí mismos, y por su puesto escriben… Personalmente siempre me ha llamado más la atención escribir, no tengo miedo de grabarme frente a una cámara, inclusive creo que soy bueno improvisando, pero el hecho de hacer un vídeo es que nunca quedaría conforme. Por eso cuando creé LiveHackNights pensaba en hacer todo de la forma más improvisada posible. Sabiendo desde antes que por más que me esforzara no sería perfecto y pues eso, estar consciente de que no sería perfecto pero seguir mejorándolo poco a poco. Y supongo que de algún modo fue un buen experimento.

Pero fuera de eso, el proceso de leer/escribir se me hace muy amigable, uno toma lo que le sirve, se salta el resto (usualmente lo que ya sabe). Como si se tratara de una mesa de postres

Quien sabe, Quizás un podcast también podría ser buena idea…

En fin, me despido de este post mencionando algunas cosas de las que probablemente hablaré: Ciencia, Proyectos personales, Películas, Libros y Filosofía. (Espero que escribir se vuelva un hábito y así pueda sacar de mi cabeza muchas de las ideas que ya llevan mucho tiempo en ella…)